El pasado dia 15 aprovechando que fuimos a comer a la Garrovilla, Miguel Angel y Lidia nos llebaron a ver lo que en un futuro proximo será su casa. Las obras están ya muy adelantadas y aunque en la foto no puede verse el interior la verdad es que es enorme. No hay mas que verla para comprovar con cuanto esmero mimo y esfuerzo la están construyendo y en cada detalle se adivinan horas y horas de planificación para que todo esté tal y como ambos han soñado desde hace tanto tiempo.
A todos nos impresionó lo adelantada que van las obras asi como el gran tamaño de la casa y lo bien diseñada que está. Y ya soñamos con verla acabada con ese gran vestidor que quiere Lidia, con el fregadero al lado de la ventana como le gusta a Miguel Angelito, y vamos ya puestos a soñar con ver la cocina llena de vaquitas por todas partes. Y como sigan las obras a este ritmo, tengo la impresión de que nuestro sueño muy pronto se hará realidad.