
Un año mas,el proximo dia 31 de diciembre celebraremos la nochevieja. Y como mandan los canones lo haremos frente a nuestro paquetito de uvas, esperando a que Ramón Garcia nos diga cuando podemos empezar a comerlas. Eso si, antes nos cercioraremos de que no nos haya tocado ninguna "pocha", y si podemos le cambiaremos a nuestro vecino de mesa alguna mas gorda por otra mas pequeña por aquello de que ocupen el memor sitio posible en la boca y al final el atraganto sea mas leve. En el momento de las campanadas queda totalmente prohivido mirarse, ni reirse, que si no la abuela Aurelia desde el cielo puede mandar a alguno a comerselas al patio. Y procuraremos hacer antes cualquier necesidad biologica, no nos vaya a pasar como a Pepe que un año lo pillaron las campanadas en el cuarto de baño. Y no vale quitarles antes las pipas, que eso es trampa. Y que sea lo que Dios quiera, que cada cual se coma las que pueda, a ser posible todas. Y despues llega el momento de los besitos, que en algunos casos solo se dá en esa noche, una vez al año y sin que sirva de precedente. Y por ultimo a brindar todos con caba, o con sidra, por el nuevo año. Y ala, a bloquear las lineas telefonicas felicitando a los que no están. Y despues, los jovenes de marcha, y los menos jovenes pues a ver un rato la tele y a la cama, como todos los años. En fin, que en un pis pas habremos cambiado de año, que espero que sea estupendo para todos, y que todas esas cursiladas que se dicen en estas fechas.